
La única fórmula que se le ha ocurrido a Florentino Pérez para tapar el éxito del triplete del Barça es fichar de forma compulsiva. Al precio que sea, y si es arrebatándoselo al club azulgrana, mucho mejor. Descartado Villa por la negativa del Valencia a traspasarle y con el precio de Ribéry disparado por culpa de los 94 millones pagados por Cristiano Ronaldo, el Real Madrid pretende ahora torpedear la 'operación Mascherano' con una oferta que, aseguran en la casa blanca, el Liverpool no podrá rechazar. Barça y Real Madrid han entrado en una guerra con un resultado impredecible.
Hasta ayer, Txiki Begiristain manejaba en solitario la contratación del centrocampista argentino. Sus representantes viajaron a Barcelona hace dos días para pactar las condiciones contractuales y ya sólo restaba convencer al técnico 'red', Rafa Benítez, de que rebajara los 40 millones más la cesión de Bojan con los que tasaba su marcha. Mascherano estaba encauzado hasta que una llamada del Madrid puede dar al traste con el objetivo azulgrana.
Fuentes solventes aseguran que la oferta blanca es estratosférica. No ha trascendido la cuantía pero se apunta que se acercaría a los 35 millones. Florentino y Valdano ven más factible que el entrenador español se desprenda de Mascherano antes que de Xabi Alonso, su objetivo inicial, así que echarán el resto. A rebufo, otra vez.
El proyecto blanco es un calco del azulgrana. Antes del desembarco de Florentino Pérez, el Barça ya había tanteado la contratación de Villa y Ribéry. Ramón Calderón andaba enredado entonces prometiendo, principalmente, a Cristiano, Kaká y Cesc. Al delantero del Valencia le atraía la idea de formar parte del líder de la Liga, un equipo de jugones que practicaba un fútbol espectacular. Con el francés del Bayern ya se había establecido contacto y hablado con sus agentes. A Ribéry, que quería abandonar la Bundesliga, también le seducía el Camp Nou y el pacto fue rápido.
Y llegaron los millones de Florentino Pérez y el mercado se alteró. El Valencia, atosigado por sus agobios económicos, subía el precio y el Bayern equiparaba al zurdo casi al nivel de Cristiano Ronaldo. Eran las primeras explosiones de la contienda.
Pero es que, incluso, hay una batalla por el plan 'B'. El Barça sondeó a Forlán y Benzemá y negoció por Ibrahimovic. El Real Madrid, también. Incluso el lateral Zhirkov es un elemento de confrontación. Obsesionado con que no se hable de los éxitos azulgrana, el Real Madrid quiere provocar el máximo estruendo posible. Se gana la Liga, Florentino sale a escena. Se levanta la Champions, se lanza la bomba Kaká. El basket se adjudica el título ACB, se presenta Ettore Messina. Es la guerra. Con mayúsculas
1 comentarios:
puto madrri de mierda no tiene miedo florentino al barça madrid putos ladrones
Publicar un comentario